Frankenstein o el moderno Prometeo del siglo XXI (Capitulo 5)

                                            Capítulo 5


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Para: Alicia Gómez Maldonado                                                                                      12-5-2008

Asunto: Viaje

Estoy empezando a sentirme cansado, cansado de este barco y de la misma tripulación, hace días que no hablo con nadie y aún quedan 3 días para llegar al puerto de Liverpool, una vez allí, mis compañeros se habrán ido y podré estar solo, que es lo que mas deseo ahora mismo. 
Continuo con mi historia:
En el momento en que empecé a leer el libro me invadió una sensación de miedo indescriptible, como si la muerte me hubiera rozado con su guadaña y que mis días estuvieran contados, ¡Como me pudo pasar eso!, el simple hecho de haber dejado el libro en la mesa... Me sentí estúpido, pero pensé que ya no podía hacer nada, así que decidí leer el libro y averiguar porque el monstruo quería deshacerse de él, el principio es así: 

"Buenos días, soy Mason Horrowith, este es mi diario, esta es mi vida resumida en 265 páginas, sé que no sabes quien soy, pero si estas leyendo este libro, significa que he muerto y que has conseguido escapar de la criatura, una hazaña inédita, ya que ni siquiera yo pude hacerlo, esta mi historia.. y también la de ese maligno ser"    
¿¡Que es esto?! ¿¡Había sucedido todo por un libro?! Un libro arrugado y viejo, con las páginas amarillas, que le quite de la mano a un cadáver... En fin, sigo leyendo:

"El 27 de diciembre de 1971, en una pequeña localidad de Pensilvania, llamada Butler, nací, era el mayor de cuatro hermanos, todos chicos, nuestros padres tenían una granja, de la cual vivían, eran humildes y muy buenas personas, no había nadie en el mundo que les odiase. 
Mi hermano Frederick era el segundo, era el más problemático, se metía en problemas con gente que no debía y siempre tenía que ir yo a ayudarle para solucionarlos, era muy guapo y esbelto, siempre estaba saliendo con chicas y no se avergonzaba de nada, era la alegría de la casa.
Matthew era el tercero, era muy callado, no hablaba con nadie que no fuese conocido, se avergonzaba de su altura, padecía gigantismo, siempre le protegíamos, con el paso de los años dejo de ser tan tímido y se abrió al mundo, cosa que me alegró, porque no había nada que me diera más pena que una persona avergonzada de si misma, un sentimiento que sentía por aquel entonces. 
Lance era el cuarto, siempre estaba imitando a Frederick por lo que se metía en los mismos líos que él, tenía el pelo rubio, era el único de la familia; un dato curioso es que nunca le vi llorar, siempre estaba riendo.
Yo era un chico normal, me llevaba bien con la gente y no me metía en  problemas, me gustaban mucho las ciencias biológicas, investigar la vida humana me apasionaba, deseaba ser científico, aunque nadie me apoyaba, era el único de la familia que fui a la universidad."

Ali, te sigo contando mañana.

Un abrazo.          
                                                                            Daniel.






      
                           

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